En los dos siglos que se conocen de arte flamenco, han sido varias las generaciones de compositores y músicos que a lo largo de estas dos centurias de historia de la música, han bebido en el flamenco su inspiración. Bastantes compositores fueron receptivos a la sugestión y al encanto de este arte, por lejana que su sensibilidad estuviera de la manera que tiene el pueblo andaluz de hacer y vivir la música: rusos, franceses, cubanos dejaron que sus obras se impregnaran de la totalidad y el ritmo del fandango, la malagueña, la solea o la petenera. Durante el siglo XIX, la península ibérica, fue visitada por artistas y compositores procedentes de los lugares más diversos, convirtiéndose en lugar de peregrinación habitual de grandes músicos: Stravinsky fue huésped de Andalucía, Glinka, que vivió tres años en España, respiró el aroma de los cantes flamencos en el Sacromonte de Granada, incorporándolos después a sus creaciones. Ravel, seducido por las danzas españolas y su variedad rítmica, llego tambien a Granada, el año 1920, y acogido por Falla vivió en su propia casa. Otros creadores que no tomaron contacto directo con el cante flamenco, ni estuvieron jamás en España, sintieron igualmente la fuerza de su atracción. Debussy presenció el espectáculo de los bailaores españoles que pasaron por París, sus actuaciones le inspiraron el preludio "La puerta del vino"; una tarjeta postal que Falla le envía desde Granada, reavivó su interés por Andalucia.
Si en toda Europa el flamenco ha encandilado a artistas y compositores, apesar de nuestras diferencias culturales, nos podemos imaginar en América, donde las raíces la cultura y la sangre hispana están por todos lados. El flamenco y Andalucia fueron fuente de inpiración para los compositores del Nuevo Mundo.
El flamenco fue América con los emigrantes, allí se fusiona con las músicas criollas y regresa formado en los cantes de ida y vuelta como la "colombiana" o la "guajira".
La pieza musical que os dejo en esta entrada es fruto de la influencia musical Andaluza en el nuevo mundo.
"La malagueña" del compositor cubano Ernesto Lecuona , forma parte de su "suite Andalucia". La Suite Andalucía es para muchos la obra mas importante para piano de Lecuona: la melancolía de "Córdoba", la sensualidad de" Andaluza", "Alhambra" que en sus notas parece dibujar los mosaicos del palacio nazari, el bailable ritmo flamenco de " Gitanerias ", la ondulante corriente del rio en "Guadalquivir" y la arrogante fuerza de la " Malagueña".
En sucesivas semanas iremos desgranando estas piezas del compositor cubano.
0 comentarios:
Publicar un comentario