No, Dios no existe, pero ha sido, sigue siendo muy rentable para la “buena gente”, para los que no tuvieron ni tienen reparo alguno a la hora de clavar mil puñales en la espalda del prójimo, y del mundo entero, con tal de quedarse con la hacienda, con tal de que los otros aprendan como fueron, son y serán las cosas. Dios no existe, pero de su nombre y en su nombre viven miles de cuervos negros y de todos los colores, cuervos con tirabuzones, cuervos tonsurados, cuervos rapados, cuervos con turbante, elegantes cuervos con traje de Armani, cuervos que disponen la vida y la muerte, que juegan con la enfermedad, que reparten el pastel quedándose con la mayor parte de él. Y por eso, y por otras muchas cosas que contar no quiero, soy materialista, porque creo que ningún hombre debe ser menos que otro, que todo ser humano debe poder satisfacer sus necesidades fuera de la esclavitud, con un trabajo digno, limitado, seguro y adecuado a su personalidad que le permita vivir en libertad, cultivar su sustancia intelectual, sensorial y sentimental, educar a sus hijos en el saber humanista, en la solidaridad, en el amor a la naturaleza, en el desprecio hacia los explotadores, los estraperlistas y los carroñeros; porque creo que la vida no es una carrera de locos que corren hacia ninguna parte, que no estamos aquí para competir unos contra otros, a costa de otros, sino para disfrutar de la belleza y paliar el dolor, propio y ajeno, para mandar hacer puñetas los escritos sagrados y sus amenazas insolentes y despiadadas; porque creo en la justicia terrenal, en una justa y obligada distribución de la riqueza que posibilite a todos, morenos o blancos, negros o amarillos, arios o gitanos, capacitados o discapacitados, tontos o listos, guapos o feos –ningún mérito tiene lo que viene con uno al nacer- ser felices sin aspirar a tener más de lo que la decencia y la buena educación aconsejan; porque pienso que las flores no se cortan, se miran, y si se cortan para hacer un bonito ramo de flores, no se entregan a los muertos, sino a los vivos; no se ofrecen a los santos a cambio de una parcela en la tierra o en el cielo, sino a un amigo o a un desconocido que pasa por nuestro lado. Soy materialista, en fin, porque estoy plenamente convencido, tanto como el más ciego de los creyentes, de que es aquí, debajo del sol, las estrellas y las nubes, junto al mar y las montañas, rodeado de árboles y animales, donde el hombre tiene su casa, su única casa, una casa de la que apenas ha construido los cimientos, una casa que no le pertenece y que ha de cuidar con todo el esmero del mundo para legarla más bella a quienes la habiten después. No hay oraciones que valgan, no sirven los sermones ni las parábolas mansas, la tierra nos llama, nos llaman los hombres que pasan hambre y necesidad, apelan a nuestra conciencia los desheredados, los desplazados, los marginados, los que nunca supieron del esplendor sobre la yerba ni la gloria de las flores. Es aquí, en el solar que piso, que pisamos, donde podemos construir el paraíso, sólo hace falta poner manos a la obra, prescindiendo para siempre del mito, de quienes lo inventaron y sustentan para que todo siga igual, como Dios manda.
Por eso, y para ir concluyendo , soy anticlerical, porque como decía el olvidado Atahualpa Yupanqui Dios es un capitalista al que gusta lo fastuoso y comer en la mesa de los ricos, al igual que a sus discípulos, predicadores y seguidores. Porque las iglesias, del tipo que sean, siempre estuvieron con los poderosos, siempre contra la libertad, siempre contra todo signo de progreso, siempre contra la voluntad del pueblo, contra su soberanía, contra su felicidad, amparando a explotadores, genocidas y tiranos; porque el clero dejó para ese Dios que inventó lo del más allá y decidió, sin ninguna duda, que su reino si era de este mundo, únicamente de este mundo y que este mundo era de su exclusiva competencia.
Cada vez que oigo a un cura sea de la religión que sea inmiscuirse en las cosas que incumben a las personas normales, meter su hocico en lo temporal, intentar obstruir las leyes que el pueblo se quiere dar para mejorar su existencia o ponerle un final digno, pienso que no estamos tan lejos del hombre de Atapuerca, que hemos evolucionado poco, muy poco. Si fuese de otro modo, hace ya tiempo que la casta clerical habría desaparecido por su propio peso, por el peso de su patética y cruel historia.
El poema de hoy: QUIÉN SABE (Mario BEnedetti)
¿Te importa mucho que dios exista?
¿te importa que una nebulosa te dibuje el
destino?
¿que tus oraciones carezcan de
interlocutor?
¿que el gran hacedor pueda ser el gran
injusto?
¿que los torturadores puedan ser hijos de
dios?
¿que haya que amar a dios sobre todas
las cosas
y no sobre todos los prójimos y prójimas?
¿Has pensado que amar al dios intangible
suele producir un tangible sufrimiento
y que amar a un palpable cuerpo de
muchacha
produce en cambio un placer casi infinito?
¿acaso creer en dios te borra del humano
placer?
¿habrá dios sentido placer al crear a eva?
¿habrá adán sentido placer cuando
inventó a dios?
¿acaso dios te ayuda cuando tu cuerpo
sufre?
¿o no es ni siquiera una confiable
anestesia?
¿te importa mucho que dios exista? ¿o
no?
¿su no existencia sería para ti una
catástrofe
más terrible que la muerte pura y dura?
¿te importará si te enteras que dios existe
pero está inmerso en el centro de la nada?
¿te importará que desde el centro de la
nada
se ignore todo y en consecuencia nada
cuente?
¿te importaría la presunción
de que si bien tú existes
dios quién sabe?
Música para hoy: La Bohemia (Charles Aznavour).Esta nostálgica melodía llena de sentimientos juveniles profundos y aplicada a una forma de vida romántica que nos transporta a los barrios parisinos de Pigalle y Monmartre.
Bohemia juvenil,alegre, loca y gris
de un tiempo ya pasado
en donde en un desvan
desnuda como el sol
posabas para mi y yo con devocion
pintaba con pasion
tu cuerpo fatigado..
hasta el amanecer
a veces sin comer
y siempre sin dormir...
la bohemia
la bohemia
era el amor
felicidad...
la bohemia
la bohemia
era una flor de
nuestra edad..
Recuerdo en aquel bar
la mesa del cafe,feliz nos reunia
hablando sin cesar
soñando con llegar
la gloria a conseguir
y cuando algun pintor hallaba un comprador
y un lienzo le vendia...
soliamos gritar con él
y pasear alegres por ahi....
la bohemia
la bohemia
era jugar,feliz y amar...
la bohemia
la bohemia
yo junto a ti, triunfar podre.
Teniamos salud,sonrisa y juventud
y nada en el bolsillo,
con frio,con calor
el mismo buen humor..
brillaba en nuestro ser,
luchando siempre igual
con hombres hasta el final,
haciamos castillos..
y el ansia de vivir
nos hizo resistir y no desfallecer.
.
la bohemia
la bohemia
era mirar
amanecer..
la bohemia
la bohemia
era soñar con un querer.
Hoy regrese al ayer
cruzé su niebla gris
y lo encontre cambiado
las pibas ya no estan
ni suben al desvan...
doradas de pasion soñando como ayer,
rondé el cuartito aquel... mas ya lo han derrumbado
y ocupa su lugar,un frio y un gran hotel
que nos oculta el sol...
la bohemia
la bohemia
que yo vivi
su luz perdió...
la bohemia
la bohemia
era una
flor y al fin murió..
0 comentarios:
Publicar un comentario